Por Marino Ramírez Grullón

La gente se sorprende al ver que cada día existen más iglesias de diferentes denominaciones pero al fin y al cabo templos religiosos que todos aclaman a Dios en busca de llegarle por los distintos caminos.

Las iglesias están como los partidos políticos que abundan más que la verdolaga, todos quieren llegar al poder pero con diferentes estrategias aunque el denominador común es ir a elecciones no importa bajo que método de alianza.

Pero en el caso de las iglesias tienen una serie de incentivos que hacen que crezcan cada día más cuando en realidad aunque el mundo es como la torre de babel, en el caso de las mismas todas quieren ir a Cristo por lo que no me explico su abundancia.

Existen calles y barrios donde usted cuenta filas de iglesias que por más interpretaciones que se realicen a la biblia no tienen explicación clara.

Los motivos son muchos pero uno de los más importantes son las exenciones fiscales que tienen esos templos principalmente exoneraciones de vehículos y otros utensilios, así como exenciones fiscales las cuales se pueden comprobar en las donaciones de los feligreses.

Esas cuotas voluntarias cuando van al banco bajo ese concepto pueden ser millonarias que al provenir de una iglesia no pasan el filtro de la investigación normal que lleva un depósito de grandes cantidades.

Si es una iglesia individual porque las hay católicas, protestantes, ortodoxas y como usted la quiera ver o si están asociadas ahí los beneficios son mayores.

En eso se parecen las iglesias y los partidos políticos tienen amplios beneficios fiscales, donaciones, financiamiento y todo lo que conlleve cuestión monetaria sin tener alguna supervisión estatal por eso es que tenemos tantos de ambos bandos.

Eso sucede mientras a empresas grandes, emprendedores, personas individuales y todo el que se le ocurra trabajar es fiscalizado hasta el tope, si es posible les quitan mediante impuestos todo lo que tienen.

Hablamos de más de 400 mil millones al año en extensiones y exoneraciones para todo tipo de entidades mientras suben los precios y servicios, así como los impuestos de varios productos.

Algún gobierno dentro de esta democracia que tenemos debería tomar medidas contra este desbalance entre los que trabajan y otros que sólo lo que hacen es discursear mediante la aplicación de promesas.

Otros elementos también contribuyen a que se le cargue todo a las mayorías mientras que una minoría se lo lleva todo como es el caso de la seguridad social y todas sus subsidiarias de recolección de recursos.

Por eso algunos dicen que el sistema está hecho para los de arriba, se refieren a los ricos que manejan todo.

A esto agregar los que gobiernan que regularmente mediante el voto popular obtenido por diferentes métodos de juegos de hambre ante la población son los que sirven de resortes a los que manejan el dinero.

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