Por JOSÉ BAUTISTA
El Ministerio Público debe botar las llaves de la cárcel de los falsificadores de actas de nacimiento para niños haitianos, que encabezaba María del Carmen Arias Castillo (prófuga), ex encargada de la Oficialía del Civil del municipio de Nizao, provincia Peravia, y Dominga Valdez (prófuga), propietaria de la fundación Aneadef, y quien supuestamente falsificó el sello de hospital municipal, que dirige la señora Dominga Tavárez Álvarez, quien hizo la denuncia de tan grave delito.
Dios del cielo, hasta donde llegarán los traidores a la Patria, pues buscando estatus a los inmigrantes de la hermana República de Haití, y me pregunto cómo será que nuestro país va a poder controlar la llegada de personas ilegales. Es una bajeza que una encargada de una Oficialía Civil del municipio de Nizao, se dedicara a falsificar actas de nacimientos de personas fallecidas dominicanas para asignarlas a diferentes niños nacidos vivos en Haití.
El Ministerio Público debe aplicar todo el peso del imperio de ley para que detenga esa bochornosa práctica de personajes que supuestamente se definen como autoridad.
Ahora se descubrió la falsificación de actas de nacimientos para niños haitianos con documentos de personas dominicanas fallecidas, me imagino que esas malas acciones podrían implementarlas en otro lugar de nuestra querida República Dominicana.
El que una ex encargada de la Oficialía Civil de Nizao, provincia Peravia, haya permitido y corroborara falsificar actas de nacimiento para legalizar niños haitianos debe ser una gran vergüenza para 12 millones de habitantes del país, que tanta sangre se ha derramado por la libertad nacional, principalmente la de Juan Pablo Duarte, Matías Ramón Mella y Francisco Del Rosario Sánchez.
La Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (PEPCA) debe poner todo su empeño para que persiga a todas las personas que están involucradas en la falsificación de actas de nacimiento en la Oficialía Civil del municipio de Nizao, provincia Peravia.