Mary Leisy Hernández
Aunque lo maten los rumores seguirá vivo, aunque lo mate el cáncer o el implacable tiempo también. Los que dejan buenos frutos no mueren, solo se transforman. Quedan vivos en sus obras, en los recuerdos, en su gente. Vivirá por siempre el líder latinoamericano José Mujica.
Ya hice una especie de duelo por la supuesta muerte de ese pequeño anciano que tanto admiro. Repetidas veces, me llegó por redes sociales la falsa noticia sobre este ex presidente de Uruguay, reconocido mundialmente por su historia de lucha social, su desapegado a lo material y su estilo de vida simple, incluso durante su mandato presidencial.
.¿Hasta cuando seguiremos re enviando lo que nos llega, sin antes investigar la veracidad? ¿Hasta donde llegará tanto sensacionalismo? Hagamos un alto, paremos de sentirnos periodistas e informar lo primero que vemos. Si se quiere ser periodista, procede ante todo ir a la fuente, investigar en profundidad para no convertirnos en des informadores, en bobos manipulables de quienes con una intención u otra, siempre encuentran estúpidos que le sigan su juego. ¿Sensacionalismo?, ¿experimento?, ¿Veneno? Quien sabe, lo de Mujica es solo un caso más. Matar a famosos y no famosos en las redes es una moda fea, una falta de respeto. La lista es larga.
Importante que cada vez seamos más cautos, que no nos limitemos a seguir noticias en redes sociales y seamos más acuciosos a la hora de buscar la verdad. Paremos de matar virtualmente a la gente. Dejemos que el guerrero Mujica se vaya en paz, cuando Dios así lo quiera. marilei@hotmail.com.