LOS ÁNGELES (AP) — Giancarlo Stanton ha visitado el Dodger Stadium desde que era un niño. Parece que cada vez que regresa, envía un recuerdo especial a las gradas del jardín.
El inicio de esta Serie Mundial entre los Yankees y los Dodgers no fue la excepción.
Stanton conectó un jonrón de dos carreras que significó la ventaja en la sexta entrada, su último gran batazo para un equipo de Nueva York que busca su 28º título. No fue suficiente, en un duelo electrizante que los Yankees perdieron por 6-3 en 10 entradas contra Los Ángeles el viernes.
“Uno nunca quiere un final así”, dijo Stanton en un vestuario vacío. “Pero de cualquier modo, aquí hay que ganar cuatro juegos y nadie dijo que iba a ser fácil”.
Criticado por los aficionados de los Yankees durante gran parte de su estadía en el Bronx, Stanton ha bateado jonrones en cuatro juegos consecutivos de postemporada. Su batazo ante Jack Flaherty hizo que la pelota saliera despedida a 116,6 mph, el batazo más fuerte en la Serie Mundial desde que las Grandes Ligas comenzaron a llevar registros en 2015.
Los seis jonrones y las 13 carreras impulsadas de Stanton son la mayor cifra de los Yankees en la postemporada. Sus 17 vuelacercas en los playoffs en 135 turnos al bate están entre las mejores relaciones estadísticas de este tipo en la historia del béisbol.