- La encuesta del mercado laboral del Banco Central arrojó que se generaron 238,972 nuevos puestos de trabajo respecto a abril-junio de 2023, superando por primera vez el umbral de los cinco millones al alcanzar la cifra de 5,002,384 trabajadores en abril-junio de 2024.
- La tasa de desocupación abierta (SU1) se ubicó en 5.3 % en abril-junio de 2024, exhibiendo una reducción interanual de 0.3 puntos porcentuales.
El Banco Central de la República Dominicana, en el interés de mantener debidamente edificados a los agentes económicos y al público en general, y en su calidad de responsable del levantamiento de la Encuesta Nacional Continua de Fuerza de Trabajo (ENCFT), presenta los principales indicadores relacionados al mercado laboral correspondientes al trimestre abril-junio de 2024.
Los últimos resultados de la Encuesta Nacional Continua de Fuerza de Trabajo (ENCFT) arrojaron que la estimación puntual del total de ocupados de la economía dominicana (incluyendo los formales e informales) superó por primera vez el umbral de los cinco millones al alcanzar la cifra de 5,002,384 trabajadores (gráfico 1). Al comparar con respecto a abril-junio de 2023, se puede apreciar que se verificó un notable aumento de 238,972 nuevos ocupados netos, equivalente a una expansión interanual de 5.0 %.
Respecto a la composición del mercado laboral en el trimestre abril-junio de 2024, como se puede apreciar en el gráfico 2, se reporta que la población en edad de trabajar (PET), es decir aquellos de 15 años o más se ubicó en 8.1 millones de dominicanos representando un 75 % de la población total. Este grupo se desagrega en dos partes: (a) la fuerza de trabajo o población económicamente activa (PEA) que constituye unos 5.3 millones de dominicanos, de los cuales 5.0 se encuentran ocupados y el resto desocupados buscando activamente trabajo (desocupados abiertos); y (b) la población fuera de la fuerza de trabajo o inactivos que alcanza 2.8 millones de personas. Este último a su vez, está compuesto por la fuerza de trabajo potencial (326,285 personas) la cual se define principalmente por los que se encuentran disponibles para trabajar, aunque no hayan realizado una labor de búsqueda de trabajo y las personas que no realizaron gestiones para conseguir un empleo ni estaban disponibles para laborar (2,477,543 millones).
En este tenor, la tasa de ocupación (TO), es decir la relación entre el total de ocupados y la población en edad de trabajar (PET), se situó en 61.9 % en abril-junio de 2024, siendo un máximo histórico para este indicador, resultando superior en 1.8 puntos porcentuales (p.p.) respecto a la tasa registrada en abril-junio del año 2023. En tanto que, el grado de inserción de las personas mayores de 15 años en el mercado laboral, medida mediante la tasa global de participación (TGP), definida como el cociente entre la fuerza de trabajo (PEA) y la población en edad de trabajar (PET), se ubicó en 65.3 % en el segundo trimestre de 2024, 1.7 p.p. por encima de la obtenida en igual período de 2023 (gráfico 3). El desempeño de este indicador obedece al incremento de la fuerza de trabajo en 235,280 personas, como resultado del crecimiento en la ocupación y la reducción de 3,692 desocupados abiertos, es decir, del número de personas que buscaron trabajo activamente en el período de referencia.
Desde el punto de vista demográfico, cabe destacar que el 51.6 % (123,391) del aumento neto en la ocupación total (238,972) corresponde a personas de sexo femenino, principalmente a mujeres con grado académico universitario, las cuales componen aproximadamente el 60 % (73,539) de las nuevas ocupadas. Asimismo, analizando la distribución por grupo de edad (gráfico 4a), se observa que durante los últimos doce meses la generación de nuevos ocupados netos se concentró en los adultos con edades comprendidas entre 40-59 años, representando el 41.6 % (99,526) de los 238,972 nuevos puestos de trabajo, seguidos por la población de 25-39 años (80,129), 60 y más (48,465), y los jóvenes de 15-24 años con 10,852 empleos adicionales.
Al analizar el aumento de 238,972 trabajadores desde la óptica de si tienen acceso a los beneficios de la seguridad social vía su ocupación, se observa que el número de ocupados formales se incrementó en 97,402 personas, situando el porcentaje de formalidad en 43.9 % en abril-junio de 2024; mientras que la informalidad total fue superior en 141,570 empleados respecto al segundo trimestre del año 2023, ubicando el porcentaje de informalidad de los ocupados en 56.1 % en abril-junio 2024 manteniéndose por debajo del promedio histórico de 57.1 % obtenido desde el inicio de la serie de la ENCFT en el tercer trimestre de 2014.
En lo referente a la evolución de las estadísticas sobre desempleo o subutilización de la mano de obra, se observa (gráfico 5) que la tasa de desocupación abierta (indicador de subutilización (SU1)), es decir el porcentaje de los desocupados que están buscando activamente trabajo como proporción de la fuerza laboral, se redujo en 0.3 puntos porcentuales en términos interanuales, al pasar del 5.6 % reportado en abril-junio de 2023 a 5.3 % en igual trimestre de 2024.
En cuanto a la tasa de subutilización de la fuerza de trabajo SU3, muy similar a la anteriormente conocida como tasa de desocupación ampliada, que toma en consideración tanto a los desocupados abiertos (buscando activamente trabajo) como a las personas que estarían dispuestas a trabajar, aunque no estén buscando trabajo en la actualidad, presentó una disminución de 1.0 p.p., al pasar de 11.8 % en abril-junio de 2023 a 10.8 % en igual período de 2024.
Finalmente, al realizar un balance en el análisis de los indicadores de la fuerza de trabajo al cierre del segundo trimestre de 2024, los resultados de la ENCFT exhiben un desempeño favorable del mercado laboral consistente con la resiliencia de la economía dominicana. En este sentido, cabe puntualizar que este comportamiento ha sido logrado ante un contexto macroeconómico desafiante caracterizado por tasas de interés en los mercados internacionales que han permanecido relativamente elevadas respecto a lo previsto, la incertidumbre a raíz de los conflictos geopolíticos en el Medio Oriente y Europa del Este, la cual se ha reflejado en una mayor volatilidad en los precios de las materias primas, así como por las expectativas de los agentes económicos ante las diversas reformas anunciadas a nivel doméstico.