Santo Domingo.- El Comité Ejecutivo del Colegio Dominicano de Periodistas CDP hace de público conocimiento que el 7 de mayo, fue sorprendidos con una sentencia de junio del 2014, dictada por el Juzgado de Paz del Distrito Nacional.
La sentencia forma parte de varios procesos judiciales llevado a cabo entre los años 2013 y 2014, en su mayoría por incumplimiento de contrato alquiler de un área de la 3era planta del edificio del CDP para operar una escuela de turismo, pero por falta de pagos del alquiler, energía y servicios generales acumuló más de 1 millón 600 mil de pesos, además el inquilino sub-alquilo a otras personas, hizo modificaciones a la estructura del edificio sin autorización de la directiva y empezó a dedicar los espacios a otros fines ilícito por lo que la directiva de entonces inició un proceso legal para rescindir el contrato.
La consultoría jurídica y asesores legales del CDP procedieron a estudiar la sentencia y fue apelada en el tribunal correspondiente y solo se espera que llegue el día y hora fijada por el tribunal, para demostrar con documentos y pruebas, y dejar este caso definitivamente cerrado.
La barra de abogado compuesta por el consultor jurídico del CDP, doctor José Echavarría, Dr. Scotto, Valentín Medrano, entre otros, trabajan desde la notificación y darán las respuestas jurídicas en los tribunales correspondientes.
Aurelio Henríquez, presidente del CDP
Queremos dejar bien claro, que no cederemos al chantaje, presiones mediáticas y por las redes sociales enviada por el señor MARVIN SORIANO ROBLES, quien reclama derechos de restitución del contrato que no cumplió.
Aclaramos que las notas enviadas por el inquilino a las redes sociales, a correos electrónicos y publicadas por algunos medios digitales, carecen de veracidad y solo busca confundir y distorsionar la verdad, dice la escuela ordena desalojo al edificio del CDP, que le fue alquilado el edificio, amenazas con demandas super millonarias, etc.
Se recuerda que los directivos del CDP del 2014, fueron advertidos de que en la escuela turística, operaba una banda de estafadores que se dedicaban a ofertar visas falsas a los Estados Unidos, ofrecían limpiar historiales de créditos de los buros crediticios y cobraban altas sumas de dinero utilizando el espacio para esos fines.
Los directivos acudieron a la justicia para deshacer dicho contrato y la respuesta del arrendatario fue enfrentamientos violentos, amenazas y sometimientos judiciales en diferentes tribunales, de los cuales dieron ganancia de causa al CDP.
Nosotros confiamos en la justicia dominicana, ellos conocerán dicho expediente y estamos seguros no permitirán que el CDP, cuyo fin principal es la lucha por la transparencia, ejercicio ético, la honestidad y el respecto a las leyes