El Banco Central de República Dominicana (BCRD) dijo ayer que al analizar el comportamiento del Índice de Precios al Consumidor –IPC-, se debe recordar que en su evolución inciden diversos factores.
Esos factores incluyen la volatilidad y estacionalidad de la producción de algunos bienes, el lugar donde se producen o los establecimientos donde se comercializan, así como el comportamiento de los precios de las materias primas en los mercados internacionales y las diferencias inherentes entre bienes y servicios, entre otros.
En un informe contenido en Página Abierta, la institución explica que “si bien a partir de la pandemia se experimentó un incremento del nivel de precios, resulta importante destacar que, desde mayo de 2023 hasta la fecha, la economía dominicana ha estado transitando por un ambiente de estabilidad de precios”.
La institución asegura que la inflación está dentro del rango meta (objetivo) establecido en el programa monetario, como resultado de las medidas coordinadas entre el Gobierno y el Banco Central para mitigar el impacto de factores externos sobre la inflación doméstica.
Razones, reacción
El Banco Central hace las puntualizaciones a propósito de que en diversas publicaciones periodísticas se ha puesto de manifiesto la preocupación de un segmento de la población por el costo de la canasta familiar y el comportamiento actual del nivel de precios, así como encuestas de opinión que han sido reseñadas. Indicó que “por otro lado, dentro de la compilación del IPC se estima una canasta subyacente, que está compuesta por un subconjunto de 294 (81%) de los 364 bienes y servicios incluidos en el IPC, que tienen un comportamiento más estable respecto al resto y la tendencia de sus precios está asociada a la dinámica de la demanda interna de la economía”.
Ese indicador excluye algunos artículos que normalmente no responden a las condiciones monetarias o de liquidez en la economía, como son los alimentos con gran variabilidad en sus precios, los combustibles y servicios con precios regulados como la tarifa eléctrica, el transporte, además de las bebidas alcohólicas y el tabaco, de manera que proporciona señales más claras para la conducción de la política monetaria.
“Aislar el impacto que tienen estos elementos mencionados resulta necesario, ya que de lo contrario podrían surgir interpretaciones no adecuadas sobre la naturaleza del proceso inflacionario, tomando en consideración que algunos choques a la inflación pueden ser transitorios de forma que no se justificaría ni requeriría una reacción de política monetaria, ya que lo relevante para las autoridades monetarias son las variaciones de precios que perduran en el largo plazo”, dice el banco en su sección Página Abierta.
Y agregó que por esta razón, la inflación subyacente es un indicador clave para los bancos centrales que siguen un esquema de metas de inflación como el caso dominicano, especialmente en contextos de alta incertidumbre, dado que por definición este aísla factores exógenos y de alta volatilidad en los precios que pudiesen no responder a las condiciones de demanda en una economía.
Es por esto que las fluctuaciones de la inflación subyacente tienden a ser más graduales que la del IPC general, sea al alza o a la baja, similar a como ocurre para las demás economías que estiman esta variable. Dijo que el IPC refleja el promedio ponderado a nivel nacional de los precios de los 364 artículos que componen la canasta básica de consumo del hogar dominicano característico.
Las encuestas realizadas y 11,168 establecimientos
Al referirse a que el IPC refleja el promedio ponderado a nivel nacional de los precios de los 364 artículos que componen la canasta básica de consumo, el banco explicó que este indicador se sustenta en los resultados de la Encuesta de Precios al Consumidor levantada por el Departamento de Cuentas Nacionales y Estadísticas Económicas, aplicada en 11,168 establecimientos seleccionados en el territorio nacional y que alcanza mensualmente una muestra de aproximadamente 193,000 cotizaciones de precios, por lo que incluye numerosas observaciones para todos los artículos contenidos en el índice.
La estimación del IPC de la República Dominicana se basa en el Manual del Índice de Precios al Consumidor elaborado en forma conjunta por el Fondo Monetario Internacional, la Organización Internacional del Trabajo, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, el Banco Mundial, la Comisión Económica de las Naciones Unidas y la Oficina de Estadística de la Comunidad Europea. Según el BCRD, ambos indicadores de inflación, tanto la general como la subyacente, han respondido a la política monetaria y a las medidas para mitigar el impacto del alza de los precios de las materias primas.