Por: Alejandro Santos
Las coyunturas electorales van definiendo y redefiniendo la correlación de fuerzas entre los partidos y hacia dentro de los partidos políticos. A su vez, se van estableciendo los liderazgos predominantes en los partidos políticos.
En el presente proceso electoral hacia las elecciones del 19 de mayo 2024, el PRM presenta una nueva realidad interna. El candidato a la reelección presidencial Luis Abinader se ha erigido como el líder único de ese partido. Abinader está personalizando en sus manos las grandes decisiones del gobierno, a su vez ha tomado bajo sus directrices el rumbo a seguir del PRM.
El presidente Abinader obtuvo fácilmente la nominación presidencial por el PRM, enfrentado a dos competidores internos, Ramón y Guido, estos no alcanzaron un respaldo significativo de las bases del PRM.
En lo que se refiere a los cargos electivos, más de un 90 % de los alcaldes del PRM provienen de las filas de Luis Abinader, todos ellos recibieron el respaldo del presidente y están alineados bajo su conducción.
Lo mismo ocurre con los candidatos a Senadores y Diputados, también más del 90% obtuvieron su candidatura gracias al respaldo dado por el Presidente Abinader.
El PRM ,sin ninguna duda, se encuentra bajo del dominio del Presidente Abinader. La casi absoluta incidencia, de Abinader en las decisiones del PRM, lo convierten en el único con capacidad de poder para marcar la ruta del PRM.
La corriente de Hipólito, tuvo sus intentos en busca de candidaturas a Senadores y diputados, inclusive en algunas demarcaciones llegaron a desafiar al Presidente Abinader. Algunos ,seguidores de Hipólito, llegaron al extremo de expresarse en términos contundentes y despectivos contra el presidente Abinader.
Los resultados para escoger los candidatos a Senadores y Diputados, terminaron favoreciendo a los candidatos respaldados por el presidente Abinader.
Se percibe ,que la corriente de Hipólito Mejía se ha reducido al mínimo, ya no cuenta con la misma fuerza y vitalidad de años anteriores.
La corriente de Hipólito se ha ido desintegrando, aunque tiene una amplia cuota en el presente gobierno de Abinader. Sin embargo, las dependencias bajo la conducción de la corriente de Hipólito, han tenido un desempeño no tan notable. El Ministerio de Agricultura, por ejemplo, está siendo considerado, según los especialistas en agricultura, posiblemente, como la peor gestión dentro de las más recientes que ha tenido el país.
La valoración negativa del Ministerio de Agricultura, afecta la credibilidad y liderazgo de Hipólito. Quien históricamente ha gozado de un gran prestigio como gerente y promotor de la agropecuaria. Hipólito alcanzó una gran notoriedad en su desempeño como Secretario de Agricultura, durante el gobierno de Antonio Guzmán.
En el presente proceso electoral, Luis Abinader se desplaza amplia y libremente, sin tener la necesidad de cobijarse bajo la sombrilla de Hipólito, ni de ningún otro dirigente del PRM.
Luis Abinader sin competencia interna dentro del PRM, tendrá la oportunidad sí obtiene la victoria de las elecciones del 19 de mayo, de organizar libremente su propio gobierno, sin tener ataduras de cuotas obligatorias, que suelen ser desfavorables, a la hora de llevar a cabo una buena gestión gubernamental.
Luis Abinader, con la enorme concentración de poder que tendrá en sus manos, obtendrá una enorme ocasión para llevar hacia adelante una gran obra de gobierno, si así se lo propone, deseamos que alcance este propósito, para bien de nuestra nación.